Pascua desde el dolor hasta las risas

D O L O R

C O L O R

C O L A R

C E L A R

V E L A R

V E L A S

V E D A S

V I D A S

P I D A S

P I S A S

R I S A S


Dios:

En medio del DOLOR, vislumbro otro COLOR. Tu voz me llama a COLAR tu aliento en mi corazón, y así CELAR la casa de mi Padre. Me animas a VELAR para no caer en tentación. Enciende VELAS en torno a mí. Hay VEDAS de cazar pesimismos. Percibo VIDAS a mi lado. Ya quiero entregarte lo que me PIDAS. Escucho que PISAS con firmeza por mí. Y me devuelves las RISAS.

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Pascua desde la muerte hasta Cristo

M U E R T E

M U E R TO

P U E R T O

P U E S T O

C U E S T O

C U E S T A

C R E S T A

C R I S T A

C R I S T O


Dios:

Desde el valle de la MUERTE me siento MUERTO, con un clamor por llegar a otro PUERTO. Sé que en la montaña de la vida tengo un PUESTO que tú has reservado para mí, pues CUESTO mucho para ti. Mi vida te CUESTA tu sangre. Por ella, me levantas hasta la CRESTA de tu montaña. Y me grabas en tu casco como CRISTA de tu propiedad. ¡CRISTO!

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

La vuelta a mi Pascua en 80 palabras

Dios:

Confusión. Perdido. ¡Solo! Herido. Agujero. Oscuro. Entro. Túnel. Oscuridad. Ando. Tentando. Resbalo. Caigo. Temor. No veo. Nadie. ¡Miedo! Ceguera. Grito. Soledad. Tiemblo. Hambre. Silencio. Escucho. Voz. Llamada. ¡Me levanto! Sigo. Titubeo. Voz. Confianza. ¡Camino! Despacio. Avanzo. Voz. ¡Veo! Un punto. Lejos. Luz. ¡Esperanza! Prosigo. Luz. Crece. Más. Avanzo. Más. ¡Luz! Cerca. Más. Avanzo. Sombras. Huyen. Luz. Llego. ¡Puerta! Luminosa. Salida. ¡Voz! Amable. Salgo. Jardín. ¡Encuentro! Abrazo. Lágrimas. Risas. Alegría. Casa. ¡Fiesta! Descanso.

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

¡Viva la vida!

Dios:

¿Cuál?
¿Cual-paz?
Paz
Paz-cual
¡Pascual!


Pregón de Pascua:

La muerte ya no tiene vida.
La vida ya no tiene muerte.
Diste muerte a la muerte.
¡Larga vida a la vida!

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Semana Santa

Dios:

Allá
los cuerpos en la playa,
tomando el sol.

Aquí
con tu cuerpo en la patena,
tomando tu sangre.

Tomando el sol,
bebiendo el sol…
Bebiendo el cáliz,
¡tomo el Sol!

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Estaré unos días en España. Me han invitado al Encuentro Semana Santa 2008, retiro de Pascua Joven con chicos de España, Portugal y Gibraltar. Probablemente pasaré unos días sin escribir en este blog. El Espíritu de Dios es quien sigue escribiendo en los corazones permanentemente. Seguiremos unidos a su bitácora.

A y Z

Dios:

Eres el principio y el finl
de mi lfbeto.
De ti prto y ti regreso.
Otorgs principios mi vid,
y le trsciendes finlidd.
Brotó mi vid de tu eternidd,
me diste tiempo terrenl,
y me disprs mi heredd.
Mis pdres me ncieron,
y tú me nciste de nuevo
un vid nuev.
Perderte serí volver ser
en-lo-que-he-sido,
serí vivir
en-lo-que-ci-do,
sinsentido,
incp de ser feli.

mén
se-los-unos-los-otros.

Vía mi hermano

Dios:

Hoy te vi:
vi a mi hermano.
Es la vía hacia ti:
“Vía Mi Hermano”.

No solitario,
sí solidario:
Cuando visto a mi hermano
es que he visto a Dios

desnudo.

Cuando, de mi vecino,
sea vecino,
se avecina
tu Reino
sin nudos.

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Hace cuatro años, el 11 de marzo del 2004, yo viajaba hacia España. Al llegar a Madrid encontré un ambiente de mucho dolor: atentados en los trenes que cobraron la vida de 190 personas. Poco después, fui a la estación de Atocha para orar. Allí, en medio de una escena desoladora, muchos dejaban mensajes de solidaridad, un joven lloraba a gritos, se colocaba flores… y deposité una grulla de origami (símbolo de la paz). Entre los mensajes, alguien había escrito el párrafo que inicia el salmo publicado más abajo.

¿Escapar de ti o es ca-paz de ti?

Dios:

El mundo está oscuro.
El mundo está frío.
El mundo está temblando.
El mundo está enfermo.
El mundo está herido.
El mundo está loco.
El mundo está lejos.

Tus hijas lloran.
Tus hijos se lastiman.
No quieren lástima.
Hurgan todo
porque urges tú.

Quiere el mundo
escapar de ti.
No se da cuenta
que cuenta contigo.
Ven, díselo.
Bendícelo.
Aunque sea rapaz,
es capaz de paz,
es capaz de ti,
que no llevas cuentas.

Que tu Espíritu renueve la faz de la Tierra,
que tu Espíritu renueve la paz de la Tierra.

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Unidos

Dios:

SomosunoydosunidosquieroestarcontigosiempreescuchartuvozamioídosusurrándomeyotetiernoAmén-se-los-unos-a-los-otros

Cree-cemos

Dios:

Cuando creemos,
crecemos;
y cuando crecemos,
creemos;
y cuando creemos,
crecemos;
y cuando crecemos,
creemos;
y cuando creemos,
crecemos;
y cuando crecemos,
creemos;
y cuando creemos,
crecemos;
y cuando crecemos,
creemos;
y cuando creemos,
crecemos;
y cuando crecemos,
creemos;
y cuando creemos,
crecemos;
y cuando crecemos,
creemos;
y cuando creemos,
crecemos;
y cuando crecemos,
creemos...

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Cuentas, cuentos y cantos

Dios:

Pasando las cuentas
del rosario,
me doy cuenta
de que no llevas cuenta
de mis fallos.

Aunque yo no tenga cuenta
en el banco,
tú siempre me tomas en cuenta.
Para ti siempre cuento.

Cuento las horas
del encuentro
contigo.
Contigo cuento
porque no eres un cuento.
¡Por eso te canto!
Conmigo cantas.

Conmigo cuentas.

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

¡Oh, Dios!

Dios:

No quiero ver para creer,
porque cuando veo el mundo
(en poca mi mirada),
veo odios.

Quiero creer para ver,
porque cuando creo,
veo tu gloria
(enfoca mi mirada)…
entonces te veo,
oh, Dios.

Odios…
O dios…
Oh Dios…
¡Oh, Dios!

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Atrevi-miento

Dios:

Tú lo sabes todo:
tú sabes que te quiero.
Tú lo puedes todo:
tu ingenio es sin-cero.

Con imaginación cree-adora
imagínate que no te quiero
(miento, pues te quiero ahora).
Así te podré “sorprender”
con un “inesperado”
“¡te quiero!”

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Nuestra barca

Dios:

Estás en la barca y duermes.
Se desata la tormenta y duermes.
Te empapas de agua y duermes.
Ruidos ensordecedores y duermes.
Todo se agita bruscamente…
y duermes.
¿Cómo es posible dormirte
en medio de tanto tormento?

Ya sé: estás soñando
y no quieres despertarte
porque te agrada tu sueño:

¡sueñas conmigo!

Estoy en tu pensamiento,
estás en “mi” barca.
¡Me abarcas
hasta en tus sueños!

Mi tormenta interior sólo cesará
cuando yo sea capaz
de dejarte dormir
en libertad.

Si me hundo,
te hundes…
No se trata de mí,
sino de nosotros:
“nuestra” barca.

Me basta saber que en ella estás
para volver a la paz,
compañero de tribulación,
compañero de tripulación.

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

Mar adentro

Dios:

Mucho he visto
a lo largo de mis viajes.
He admirado tantos mares
y éste es mi preferido:
Mar Adentro.
Por mi interior sendero,
navegar… adentrarme…
hasta encontrarme…
encontrarte…
¡encontrarnos!

Ir a mar adentro.

Trazar mi itinerario:

Ir. Amar. Adentro.

Amén
se-los-unos-a-los-otros.