miércoles, 13 de febrero de 2008

Plicarmes

Dios:

Te elijo
como maestro
porque primero
me elegiste como amigo.

No tienes que su-plicarme…
Sin com-plicarme,
decido im-plicarme
para a-plicarme
tus lecciones:
en ti multi-plicarme,
aunque me lesione,
aunque no sepa ex-plicarme
las selecciones
de tus predilecciones.

Al final de mis elecciones,
¿tendrás algo que re-plicarme?

Amén
se-los-unos-a-los-otros.

No hay comentarios: